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Nuestra amiga argentina le cumple fantasías a Pau

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Estas son las cosas que ni yo sé como llego hacer, y que obvio, aunque algunos no lo entiendan solo lo puedo contar por acá.

Yo cuando me fui con Pau el fin de semana afuera (para los que no lo saben Pau es una amiga de la facultad que es lesbiana, yo me acuesto con ella y nos fuimos un fin de semana a la costa como dos lesbianas), ella, me confesó que tenía la fantasía de cogerme con un amigo de ella, pero que la historia que ella se había armado en su cabeza, era que yo ni lo tenía que conocer, y ni bien nos encontráramos en la casa de ella, me empezaban a coger entre los dos.

Al principio la saque cagando, pero que se yo esas cosas me gustan aparte confío en ella, y sabía que no iba a pasar nada malo. La cosa quedó ahí, pero me siguió insistiendo con la idea y a mi me empezó a calentar hacerlo, no se dejarme coger por un amigo de Pau, como una trolita, que ni lo conozco, y él a mi ¡tampoco!

La cosa, es que tanto me dijo que le dije: “está bien, pero no lo quiero programar, quiero que para mi sea una sorpresa, algo inesperado para ese día, así me calienta más, si ya está programado, no se” para mi no es lo mismo, la dejé a ella que lo ¡arregle! Y yo con la intriga de ¿cuándo sería?

La cosa es que durante la semana, como siempre me voy un par de días a su casa, después de la facultad, y yo con la intriga, de saber si ese sería el día o no, pero no almorzamos algo, estuvimos juntitas un rato y me iba, ya es como una “amigovia”, algo que en algún momento, me voy a tener que sentar a hablar con ella.

Bueno hoy viernes, salimos de la facultad, me dice de ir a su casa un rato, y como siempre le digo que si, pedimos un par de empanadas, comimos, y después de llevar las cosas a la cocina, estábamos en el living (bah ya conté es un departamento re chico de un solo ambiente), y nos empezamos a besar (como tantas veces, hasta ahí todo normal), me empieza a sacar la blusa, el corpiño, me besa las tetas, ¡ya me estaba calentando!, me recuesta sobre la cama, me saca el jean , la tanga, y me empieza a besar ¡la concha!, ¡pero no me hizo acabar!, no me dio a tiempo.

Como les decía, me la empieza a chupar, y cuando vio que estaba yo re caliente, ¡se separa de mi!, yo no entendía nada, me trae una camisa grande (que no se de donde la saco) y me dice: “Caro, ponete esta camisa, y nada más”, yo seguía sin entender, y le pregunto: “¿qué pasa Pau?, ¿estás loca?, no entiendo nada.”

Pau entonces me dice algo así: (mucho no me acuerdo porque me puse nerviosa, pero nerviosa en serio, ya lo van a entender) “Vos me pediste que lo de mi amigo fuera una sorpresa” mira el reloj y me dice, “en 5 minutos viene Sebas y te vamos a coger entre los dos, y no te lo dije antes, porque vos me pediste que fuera así.”

Por eso estaba que me moría de nervios, era el juego que yo le había pedido, pero no sé en el fondo nunca pensé en que llegaría ese día, y obvio, ya no le podía, ni tampoco quería decirle que no, me puse la camisa, y nada más, la adrenalina, los nervios, la calentura de saber que me iba a coger junto con Pau alguien que ni conocía, ¡me mataba!, la verdad que lo que sentí en ese momento, ¡no sé cómo explicarlo!

Suena el portero, ella, me dice que me quede en la cocina, le abre, me viene a buscar, la verdad, que ya ni pensaba, hacía lo que me decía, y la cosa fue así.

Pau: Sebas, este es el regalito que te tenía.

(Y yo casi en bolas como una prostituta delante de alguien que no conocía, pero por suerte estaba muy aceptable.)

Yo: hola, y le doy un beso en la mejilla.

Pau, agarra mi mano y me la pone ¡sobre la pija de él!, no me resistí, como les dije era el juego que iba a jugar, se la empiezo a manosear sobre el jean, hasta que se le empieza a parar, y me mete un beso, al que no me resisto, me parte la boca, y su pija cada vez mas parada (y como siempre digo que soy re competitiva en esto) las cosas me gusta hacerlas bien, jeje

Le empiezo a desabrochar el jean, hasta que encuentro la pija, una linda pija, pero con muchos pelitos para mi gusto, mientras Pau, ya me estaba desabrochando la camisa y acariciándome ¡las tetas!

Pau ya me saca la camisa y me deja en bolas, Sebas se sienta en el sofá, y como siempre, esmerándome, muy de a poco se la empiezo a besar, a acariciar a chupar, mientras Pau, no paraba de tocarme toda y eso me ponía más loca, me decía: “chúpasela bien que le gusta”, y se la chupaba, pero la agarre a Pau con un beso y la lleve a la pija y nos besamos mientras las dos se la chupábamos.

Así, estuvimos un largo rato chupándosela y besándonos con la pija en el medio hasta que Sebas me dice: “ven putita, subite que te quiero coger” como buen papel de puta que estaba haciendo le pregunto: “¿ya me cores coger bebe?” y me dice que si, mientras Pau, le decía: “vas a ver la rubia como acaba”.

Se pone un forro y llegó el momento que Pau tanto esperaba, me subo arriba de el apoyando mis pies sobre el sillón, y de a poco me la empiezo a ¡clavar! estaba tan caliente que entro fácil, y empiezo a salta sobre esa pija y ya también a gemir, y cada vez gemía más, y Pau me besaba las tetas.

Sebas me pregunta: “¿te gusta putita?” “siii”, le digo que siii, que me gusta que me coja, “¡cógeme más fuerte!, ¡más fuerte!” Y Pau, me seguía mordiendo las tetas y me acariciaba ¡todo lo que podía!, y Sebas me seguía diciendo: “grita putita grita” y mis gemidos ya eran gritos y termine acabando como una verdadera ¡puta! Con su pija dura adentro me empecé a besar con Pau, nos comíamos las bocas y nos pasábamos las manos por ¡todos lados!, yo estaba ¡re caliente!

Sebas se acuesta en el sillón, yo arriba y sobre de él, mientras me seguía cogiendo y le dejaba mi colita libre para Pau, que no tardó mucho empezar a besármela, comérmela, chupármela, me metía la lengua, y después me empezó a meter un dedo, dos dedos, ya estaba dilatada y Sebas me seguía cogiendo (no se como ¡tardaba tanto en acabar!), siento que Pau me empieza a meter ¡un consolador!, “nooo”, le digo: “porfi los dos juntos noooo”, y me dice: “si rubia, te dije que te ibamos a coger los dos juntos”, y de a poco me lo va metiendo, hasta que me lo mete todo, yo ya no me podía ni mover, era puro placer, siguieron así un poco más, hasta que me hicieron acabar de nuevo, Sebas también acabó, pero mis piernas quedaron temblando, ¡ya no daba más!

Me senté en el sillón, y Pau me dice: ”ahora me toca a mí”, medio como que se para en el sillón, inclinada y me pone su conchita ¡en mi boca!, ufff, todo esto al lado de Sebas, se la empiezo a chupar, a morder, Sebas decía: “que hermosas lesbianitas que son” esas palabras eran como mágicas, más calentura me daba, le empiezo a meter los dedos, Sebas me empieza a comer , a besar las tetas, y también me empieza a tocar la concha, y yo abría mis piernas dejándolo, y sintiéndola a Pau, ¡que placer!, hasta que Pau también acabó ¡desaforadamente!

La verdad es que ya no tenía más fuerzas, pero Sebas me dice: “putita veni de nuevo arriba mio” y obvio le hice caso, pero cuando me subo, me dice: “no al revés, ¡dame la espalda!” ¿me explico? Y me subo arriba de él, otra vez apoyando mis pies en el sillón y me la empieza a poner ¡por la cola!, que gracias al consolador que me había puesto Pau, no tardó mucho en dilatarse y que su pija entrara.

Ya cuando la tenía adentro y el dolor se transformo en placer, me empezó a coger, a bombear por la cola, y Pau como siempre, como podía me besaba, me tocaba, me decía: “rubia, como te estamos cogiendo, ¿te gusta?” obvio, mis gemidos ya hablaban por mi, pero igual le decía: “siii, que siiii, que me cojan ¡así!”, hasta que otra vez me hicieron acabar, y también quede temblando, pero ¡ya no podía más!

Sebas me dice: “te quiero llenar la boca de leche”, me trataba como una puta, pero en realidad fui ¡como una puta!, no podía decir ¡nada!

Me quedo sentada en el sillón, porque ya ni podía pararme, y se la empiezo a chupar, le acaricio los huevos, me la pongo toda en la boca, esta vez Pau, no hizo nada, solo me miraba, hasta que siento que le va a explotar, me agarra la cabeza, me la mete toda en la boca, así toda, sin dejarme sacarla de mi boca, hasta que me acaba y me llena la boca de ¡leche!

Me pidió que me la tragara, lo dudé, pero le hice caso y se la seguí chupando hasta dejársela ¡limpita!

No se, habrían pasado como dos horas, Pau le dice a Sebas algo así: “bueno nene, ya esta, Caro no da más, el regalito ya fue”.

Sebas se viste, yo ya estaba más que entregada, en bolas en el sillón, me da un beso ¡y se va!

Nos quedamos con Pau, las dos en bolas en el sillón, me pregunta si me había gustado!, la calentura ya se me había ido y aunque no me crean, me dio esa cosa de vergüenza, me pongo colorada y se da cuenta, y se caga de risa, me dice algo así como: “Caro, te dejaste re coger por alguien que ni conocías y ahora te da vergüenza”, era verdad lo que decía, pero yo soy ¡así!

Me da un beso tierno, suave, como para que me sienta bien, pero ese beso cada vez fue más fuerte, nuestras piernas ya estaba entrecruzadas, sintiéndonos esa piel suave ¡que solo nosotras tenemos!, yo ya estaba calentándome de nuevo, me empieza a tocar la concha le digo que por favor no, ¡ya no daba más!

Pero a ella cuando estoy así es cuando ¡más le gusta!, agarra el consolador de nuevo, me lo empieza a meter en la concha, mientras me besaba mis piernas, me las acariciaba, hasta que me hace acabar ¡otra vez!

Yo ya había acabado mil veces, ¡ella no!, me recuesta en el sillón, en la posición del 69, nos empezamos chupar de nuevo, pero matándonos, hasta que acabamos nuevamente ¡las dos juntas!

La verdad es que no daba más, ni saque la cuenta las veces que acabé, me quede un rato mas ¡y me fui!

Aparte sabía que a la noche salgo con mi novio, y me iba a coger, y sabe que a mi me gusta acabar varias veces, no se, me tendrá que calentar mucho jeje.

Y como siempre, estas cosas, las cuento ni bien las hago, para poder contar sin olvidarme lo que sentí encada momento. (Ojo estos hechos ocurrieron hace unos tres años).

(9,30)