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Héctor como siempre sorprendiéndome

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Me llamo Alexa, les recuerdo como soy, pues soy súper linda, sexy, que se depila toda, tengo una fascinación por la ropa interior que entre más pequeña es mejor, no me siento linda, pero si atractiva ya que mido más de 1.75 descalza y con los kilos que subí últimamente me creció el culo, pero me mantengo acinturada y mis tetas están ricas, duras y en su lugar, cabello negro largo y unos labios mordelones.

Pues apenas regrese a mi rancho allá en la CDMX a ver a mis papas que ya los extrañaba pero pues mi ex-profe el sexy y guapo Héctor se enteró y me llamo, que quería saludarme y que onda que si nos podíamos ver, pasaron unos días que me divertí y disfrute con mis padres así que decidí verlo y salir con él.

-Hola, oye tengo que salir a Cuernavaca a dejar unas cosas, me acompañas?

La verdad ya eran mis últimos días así que sin dudarlo acepte

-ok pasa por mí aquí te espero.

Sin dudar me quite los jeans que traía y me puse un overol de falda, me cambie la blusa por una de tirantes, debajo ya traía yo el bikini ya saben entre más pequeño mejor y como que mi inconsciente sabía que cogería pues me traje el que más se me mete al culo, me puse mis tenis me hice una cola en el cabello y listo a esperarlo, claro mis pensamientos ya estaban en todo lo que habíamos hecho y en lo que haríamos.

Cuando nos encontramos nos saludamos con un rico beso como si fuéramos novios y que no nos habíamos visto en mucho tiempo, le pase los brazos por su cuello y me tomo por la cintura, como siempre le deje ver mis lindas y largas piernas con ese overol que por cierto lo subí de más para que me viera casi sin esfuerzo y la blusa bien pegadita hizo que se le empezara a despertar su animal, mi cometido había empezado jejeje no necesite más.

Pues agarramos Churubusco y luego Tlalpan para salir a la autopista de Cuernavaca a pasar un par de días de calor en la alberca y el ya llevaba lista una canasta con todo lo que íbamos a comer para no tener necesidad de salir para nada.

-¿Oye linda y tus cosas?

-¿Qué cosas?

-Tu traje de baño, para que estemos en la alberca

-Lo traigo puesto pero acaso tú lo vas a necesitar? -yo ni conocía a su casa jajaja todavía pensando que era una alberca privada

-¡Claro que no! -me contesto, aunque un poco sorprendido.

Nos fuimos platicando en la carretera y de vez en vez me acariciaba las piernas.

-¿Sabes de mis manos traviesas, además me mi insaciable hambre verdad?

-Eh, no, ahora eres así? -me pregunto

Son independientes a mí, hacen lo que quieren, cuando quieren y diciendo esto comencé a sobarle por encima del pantalón y rápidamente ya tenía una erección, inmediatamente ya me acariciaba las piernas las cuales yo separo y mi overol ya estaba hasta la cintura, recargo la cabeza en el asiento y cierro los ojos mientras le sobaba ya ese animal que deseaba metérmelo a la boca y claro él ya me acariciaba sobre el bikini empapado.

Donde pude me orille sobre la autopista y comenzamos a besarnos, me hice el bikini de lado con la falda levantada y él ya le había desabrochado el pantalón y sacado la verga que por cierto que bonita grande cabezona y venuda, nos separábamos de besarnos me levante la blusa y mis tetas ya estaban al aire, me comenzó a besar y morder los pezones, yo tenía su pito en mis manos y se la jalaba cada vez más fuerte mientras mordía mis pezones.

Yo para ese entonces ya tenía medio orgasmo en camino, él me estaba dando una dedeada de miedo yo estaba abierta de piernas en el tablero del coche pero yo lo que quería era toda su leche en mi mano en mi boca donde fuera pero ya!!!

Papacito chulo quiero tu leche hasta la última gota mientras le apretaba ya con fuerza su animal y se la jalaba de arriba a abajo, cuando empecé a sentir como empezaba a ponérsele más dura me gire poniéndome frente a su animal dándole un besito y empecé a mamársela poco a poco primero la cabecita después empecé a bajar más y más y unas chupadas después me la estaba metiendo hasta la garganta!!!

-¡Ahí Voy!  me dijo, y se la empecé a mamar con movimiento más rápidos hasta que sentí su primera explosión en mi boca ¡Que rico! ¡Que caliente! ¡Que es espesa! le chute hasta la última gota...

Seguimos nuestro camino a Cuernavaca con una sonrisa de oreja a oreja, claro yo más porque sabía lo que me esperaba.

Cuando llegamos a su casa por cierto muy linda y coqueta, después de prepararnos algo de tomar nos fuimos a la alberca.

Pues en camino a la alberca mi overol cayo, mis tenis quedaron en el camino así como mis tiñes y lo último que salió fue mi blusa quedando en mi microbicida que lo traía bien metido en el culo solo me lo acomode tantito así como mis tetas que casi estaban al aire, tiempo que el aprovecho para deleitarse con este hermoso cuerpecito que sabe que es suyo cada que me ve, aunque ya me ha visto así muchas veces no se cansó de deleitarse la vista con el espectáculo que siempre busco darle. Mis tetas pequeñas duras con los pezones erectos y duros, sus piernas kilométricas y mi culo bien paradito y grande y bueno mi bikini bien metidito claro estaba que me había depilado completita.

Se quitó la ropa y nos recostamos a refrescarnos con nuestras bebidas abrazados en el pasto sobre unas toallas tomando el sol completamente solos sin que nadie nos viera o se metiera en ese fin de semana.

-¿Me pones bronceador? -sin dudar contesto que sí!!!

Me puso boca abajo y comenzó a ponerme aceite sobre todo el cuerpo, primero los hombros, bajo a mi espalda, después la cintura, acaricio con aceite nalguitas y después sus piernas, volvió a subir a mis nalgas por el interior de las piernas que las separe tantito cuando llego hasta arriba y me acaricio entre las nalgas aceitándome el culito que ya ha disfrutado infinidad de veces.

A estas altura este ya tenía la verga bien parada de nuevo, se subió en mi de verdad no me di cuenta cuando se quitó la bermuda, me masajeaba la espalda mientras su pito y huevos estaban sobre mis nalguitas, yo levantaba la cadera para hacerme sentir la cola más dura.

Me volteo de frente y me puso bronceador en el pecho (la parte de arriba de mi bikini ya había salido volando) acaricio y masajeo mis tetas duras, bajo hasta mi vientre y me acaricie el ombligo. Bajo sus manos por mis piernas poniéndole bronceador, cuando sube de nuevo me acaricia la panocha con las manos aceitadas, discretamente separo más las piernas y le doy completo acceso a sus manos aceitadas.

-¡Ahora te toca a ti! -le dije. Y acostándolo boca abajo comencé a ponerle aceite por la espalda mientras movía y apretaba su panocha contra mis nalgas yo podía sentir sus vientre y su humedad pegados a mí. Le puse aceite en las nalgas y baje separándole las piernas le puse aceite por el interior de las piernas y después subí hasta sus nalgas de nuevo.

Lo volteo y ahora le pongo aceite sobre el pecho, el abdomen, las piernas y después alrededor de su pito, la cual la miro, le dio un besito y succiono tantito la cabecita.

Cuando terminamos de ponernos bronceador nos acostamos boca arriba sintiendo el calor del sol sobre nuestros cuerpos desnudos.

Se colocó sobre mi para besarme y ya con nuestros cuerpos bien aceitados pues resbalaban de una forma muy rica y sexy hasta parecía película porno ahí, me separo las piernas y comenzó a frotarse encima mío acariciándonos todo el cuerpo era tan rico tan sexy wow, nuestros besos se hicieron más intensos mientras me acariciaba las tetas y yo le agarraba el trasero, yo su pito lo frotaba con fuerza en mi pubis y solo mi parte de abajo del bikini nos separaba, pero de repente lo separo y salta a la alberca !ya está haciendo demasiado calor!

Nos metimos a la alberca a nadar un rato, ya que nos refrescamos y nos cansamos un poco lo abrace del cuello y me repague contra su verga, levanto las piernas y sobo con su miembro mi panocha, me agarro por las nalgas y me apretujo contra él, su verga se acomodó entre mis piernas - ¡Metete! ¡Quiero sentirla hasta adentro de mí! – le dije mientras yo lo guiaba con la mano adentro de mi vagina cuando hicimos mi bikini de lado y comenzó a entrar empecé a gemir y a empujarme hacia él, cuando lo tuvo bien adentro de mi comenzamos a movernos aprovechando el movimiento del agua, me tenía bien agarrada por las nalgas y yo estaba colgada de su cuello, nuestras bocas no se separaban y nuestras lenguas no se cansaban de meterse en la boca uno del otro.

-¡Ahhhh! ¡Mmmmm! tuve un fuerte orgasmo, ¡Asiii! ¡Papacito chulo! ¡Que rico!

-¡Vámonos afuera de la alberca! -le dije y nos salimos, así mojados como estábamos nos recostamos de nuevo me acostó boca abajo y comenzó nuevamente a ponerme bronceador, me puso en la espalda, en la canastita que llevábamos había un lubricante, así que bajo por mis nalgas, acaricio mis piernas y nuevamente cuando subía me separe las piernas y comencé a acariciar con lubricante entre sus nalgas yo levanto el culo invitándolo a seguir, ya sabía lo que pasaría y tenía ganas de darle mi culito a Héctor, me separo las nalgas y me puso lubricante en el chiquito puse mis manos detrás le ayude a abrirme las nalgas ofreciéndole una vista excitante de mi culito, me puso más lubricante y comenzó a meter el dedo índice en mi culito rápidamente comencé a moverme y a gemir mientras el metía el dedo, mi culo se fue acoplando a su dedo y yo me movía más y más con el culo levantado y las nalgas separadas.

-¡Métemelo! -le dije- ya quiero sentirte adentro de mí, era algo que pasaría y quería disfrutarlo!!!

Agarre su verga con la mano, me puse más lubricante y llevo la punta a la entrada de mi culo precioso lindo que casi no doy, cuando la cabeza entro vio cómo se abrió mi chulito grite de placer ¡Asiiii! ¡Mmmmm! ¡metete!

Poco a Poco fue deslizando su vergota venuda y cabezona que jamás pensé entrara en mi culo pero supo acariciarlo tocarlo y rilarlo que lo logro, casi no me movía, tenía los ojos cerrados y me mordía los labios, hasta que ya tuve toda su verga dentro y sus huevos chocaban con mis nalgas comencé a moverme lentamente, el empezó a sacar y meter suavemente su verga de mi culito mientras me tenía agarrada por la cadera y acariciaba sus glúteos dándome una nalgada de vez en cuando, me sacaba la verga suavemente casi hasta la cabeza y después me la metía también suavemente hasta el fondo.

-¡Manassas! ¡Dámela hasta el fondo -le pedía y el me la metía casi de golpe hasta la base.

Nuestros movimientos se aceleraron y el seguía sacándola hasta la cabeza solamente que ahora ya la metía con mucho más fuerza

-¡Ahí voy! -me dijo cuándo ahora le tocaba al venirse

-¡No la saques! Métela hasta adentro -(como a mí me gusta), así lo hizo cuando sentido que iba a explotar, apreté el culo cerrando las piernas y sentí como se vino dentro de mí, me agarro por las caderas para empujármelo lo más adentro que pudo.

-¡Mmmm! ¡Ahhh! ¡Que caliente! -le dije que no se saliera hasta que me dejara toda la leche dentro.

Cuando termino saco su verga suavemente y agarrándome con la mano me unte las últimas gotas en los pliegues de mi culo.

Nos acostamos de nuevo mientras nos besábamos, nos abrazábamos y nos acariciamos valiéndonos si dimos show así desnudos en su casa.

Pasamos largo rato tirados al sol besándonos y acariciándonos, nos tomamos una cervezas y comimos botanas, más tarde volvimos a meternos a la alberca y jugamos en el agua aprovechando para tocarnos y jugar con nuestros cuerpos, nuevamente ya que nos refrescamos comenzamos a besarnos muy abrazados, le sujete con las piernas alrededor de la cintura y de nuevo me agarro por las nalgas, así que Héctor ya con una sema erección empezó a frotar su animal con mi panochita ¡Que calentura pensé!!! ¡Héctor no se cansa! No cabe duda que le encanta cogerme.

Nos separamos tantito y me fue a sentar donde estaban las escaleras, ahí me recosté dejando mis piernas dentro de la alberca y mi pubis al aire - Me gusta sentir el sol caliente en mi vagina!

-¿no se te antoja lo que ves? -Y comencé a tocarme, metí un dedo y comencé a estrujarme frente a él, cerraba los ojos y metí dos dedos comencé a gemir de nuevo mientras mis dedos desaparecían dentro de mí, levantaba las piernas y con la otra mano apretaba mis senos, yo estaba muy caliente!!!

Se quede un rato observándome mientras me tocaba, su pito respondió a la vista que le estaba regalando, me salí de la alberca y comencé a bailarle de una forma más directa hasta me metí un dedo casi frente a su cara ¡Que masturbada me estaba dando y que deleite el verme hacerlo!

Se acercó a mí y por fin empezó a besarme, bajo a mis tetas y a morderme los pezones, bajo por mi vientre hasta que comenzó a comerme mi panocha sedienta de él. Se levantó y agarrando su verga con una mano comenzó a frotarla en la entrada de mi panocha, lentamente con la cabeza abrió paso entre mis labios y sobo ligeramente mi clítoris, me daba metiditas y la sacaba para seguir frotándose en mi cola mojada, levanto mis piernas las puso en sus hombros y así sin avisar me la metió hasta el fondo OCHO!!! Grite!!! Pero la saco de nuevo, levanto un poco mi cadera volvió a frotarse y ummm otra vez hasta el fondo!!! Yo estaba empapada de placer

-¡Métemela pero quiero que te vengas hasta el fondo de mí no te salgas!!!

Levanto mis caderas y me la metió hasta adentro, así con las piernas juntas en un solo lado de un hombro me tenía bien cogida y yo gimiendo, cuando sentí que se empalmaba cada vez más, abrí mis piernas y lo sujete con las mismas por la cintura empujándolo hasta el fondo de mi para que hiciera lo que le ordene.

-¡Dámelo! ¡Vente en mí, toda tú lace papacito!

Cuando perdió su erección y salió dentro de mí se tiro a un lado a recobrar el aliento, descansamos un rato y nos metimos a la alberca a refrescarnos.

Nos fuimos a bañar, nos vestimos y salimos de regreso a México.

Cuando llegamos nos despedimos con un rico beso en espera de nuestra próxima visita ya sea yo aquí en la CDMX o el en Playa del Carmen.

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