Nuevos relatos publicados: 7

Dos parejas en la misma casa

  • 3
  • 28.761
  • 9,05 (20 Val.)
  • 2

Era un día normal como cualquier otro cuando escucho que mi esposa recibe una llamada de una amiga que teníamos mucho sin ver y quería venir de visita a la ciudad donde actual mente vivimos.

Mi esposa es morena clara cabello oscuro largo, mide 1. 64 complexión delgada, tiene pies hermosos, un culo muy apetecible y es una persona muy linda, actualmente ella tiene 23 años, sus experiencias son muy pocas ya qué nos juntamos a muy temprana edad y no disfruto mucho de otras personas.

Yo sin embargo soy un hombre de tez clara, mido 1.85, estoy lleno de tatuajes por casi todo mi cuerpo, el tamaño de mi miembro ronda los 17.5 y los 18 cm, experiencias sexuales he tenido varias desde temprana edad, me considero una persona esporádica mente pervertido y con la mente muy abierta para poder separar el deseo sexual del amor verdadero.

Bueno, ya una vez resumida la apariencia de mi esposa y mía, continuamos con la experiencia vivida.

Su amiga le llama para preguntar si la podíamos recibir a ella y a su actual novio en nuestro departamento, sería cuestión de uno a dos días por lo que Gabriela lo platica conmigo y yo sin ningún inconveniente accedo, le comento que la esperábamos con gusto y que llamara cuando estuviera cerca para salir a recibirlos.

Al llegar al departamento su amiga Melany de 22 años morena, de estatura parecida a Gabriela (mi esposa) portaba un vestido de color azul floreado qué dejaba ver sus piernas y su figura, se veía muy bien, su novio que le vamos a poner el nombre de Alejandro, tiene 23 años y es un poco más bajo de estatura qué yo, es de complexión delgada y también con tatuajes.

La tarde siguió después de conversar un rato, la hora de comida estaba encima por lo que acordamos separarnos y salir a comprar algo de comer, la idea que pasaba por mi cabeza era que Alejandro y yo fuéramos por la comida y las chicas se quedarán en casa, pero Gabriela comenta -¿Por qué no van tu y Melany por la comida? y por mientras Alejandro me ayuda a preparar unas botanas y las bebidas para comer. Melany – pues me parece buena idea. Se despide con un beso de Alejandro y nos apresuramos a ir por la comida, le comento a Melany por el camino que por lo menos nos íbamos a demorar una hora y media ya qué estaba algo retirado, a lo que ella comenta que no tenía problema.

(Esta parte de la historia fue contada por mi esposa después de la visita de los amigos. Ella se abrió a mi al confesarme su infidelidad, yo indague para saber los detalles por el morbo qué esto me provoca.)

Se quedaron Gabriela y Alejandro solos en casa (Gabriela portaba un vestido de color café, unas chancletas normales y el cabello suelto) Alejandro como cualquier otro hombre comenzó a sacar platica y hacer bromas ya preparada la bota se van los dos a la sala y se sirven un par de tragos, Alejandro empieza hacer preguntas de sexo, por lo que Gabriela las contesta y la atención sexual se fue apropiando de ellos, lo que hizo que esto estallara fue cuando ella le punta a Alejandro si le gusta la vaina con vellos púbicos y rasurados y el comenta que depende la mujer, qué si se tratara de ella se la comía como la trajera, por lo que Alejandro toma la iniciativa y la besa ella se sube a sus piernas y empieza a frotare sobre la erección qué Alejandro el empieza a masajear su culo qué se podía sentir todo por el tipo de vestido, rápidamente la recuesta sobre el sillón y descubre sus tetas, qué empieza a chupar y los gemidos de Gabriela se apoderaba del departamento.

Al principio ella dudo en llevar esto más allá pero la excitación la domino por lo que Alejandro quita su vestido y la lleva a nuestro dormitorio y quita su ropa interior de encaje y nota que estaba muy húmeda, Gabriela siempre tiene vello púbico por lo que Alejandro baja y comienza a chupar su vagina hasta que siente que Gabriela no puede más y saca su pene y lo mete sin más preámbulos por lo que comienza a en vestirla de una manera salvaje después la pone en cuatro y chupar desde su vagina hasta su culo y vuelve a penetrarlas hasta qué Gabriela empieza a estallar en chorros y esto a él lo prendió demasiado por lo que metió su pene mientras la nalgueaba y se vino dentro de ella.

Déjenme sus comentarios si quieren saber que pasa después de que regresamos por la comida.

(9,05)