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Enterré mi pene en el culo de mi nuera

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De por sí ya ando con la polla caliente, imagínense entonces como estaba cuando empecé a ver el culito de mi nuera todo los días.

Mi hijo me hizo un regalo de Navidad, trajo a vivir a mi casa a su chica y fue el mejor regalo que tuve en mucho tiempo. Me levantaba de dormir y lo primero que veía en la cocina aparte de mi mujer era ese hermoso culito de esa preciosa señorita de cabello largo y rubio. Para explicarlo mejor ella tenía una manzanita como culo que estaba para devorarlo a mordiscones y comprobar si era tan dulce como aparentaba serlo así que hice todo lo que estaba a mi alcance para lograr mi objetivo.

Como soy taxista a veces trabajo de noche y descanso por las mañanas, así que a veces solía pasar que me quedaba solo con esta joven ya que mi hijo al igual que mi esposa trabajan por la mañana. Entonces yo aprovechaba esos momentos para acercarme a ella y cuando sentí que había cierta confianza entré los dos me tiré de cabeza sin pensarlo dos veces.

-Che porque no aprovechamos que estamos solos y hacemos algo más divertido que ver la televisión -le dije yo.

-Cómo qué?

-Yo estaba pensando en hacer algo placentero, que tal si te llevo a mi cuarto y cogemos un buen rato -le dije yo en tono de broma.

-Jajajaja

-En serio te lo digo.

-Eres muy divertido Jorge (mi nombre).

-No te gustaría que te chupe la concha un buen rato?

-En serio me lo decís?

-Sí, no tenés ganas de coger? Estamos solos, mi hijo y mi mujer vienen dentro de unas horas, aprovechemos que estamos solos.

-Si pero no, soy la pareja de tu hijo y no puedo hacerle esto.

-Es mi hijo también y que tiene? Yo no le voy a contar nada y vos tampoco, va a ser un secreto entre los dos.

-Pero no estaría bien.

-No pienses en eso, pensá en que vos sos una mujer y yo un hombre y nos podemos dar placer mutuamente.

-Pero no es eso.

-Vení, vamos a mi cuarto entonces -le dije yo levantándome de la silla.

-No sé.

-Dale vení no seas tímida.

Entré a mi habitación y segundos más tarde entró ella. Le dije que deje abierta la puerta y que se siente al lado mío en la cama.

-No sabes cuánto te deseo, tengo ganas de hacerte de todo -dije yo estando a lado de ella.

Entonces me lancé sobre su cuello y se lo empecé a lamer y a tocarle las tetas también. Ella todavía estaba media estática y no hacía mucho, todo el trabajo lo estaba haciendo yo hasta que desenfunde mi poronga y se puso bastante activa.

Estando sentados todavía en la cama me baje el short, agarré su mano e hice que la envuelva alrededor de mi poronga erecta. Entonces agarrando todavía su mano hice que me empezará a pajear para luego soltarla y dejarla que ella siga sola.

-Como te gusta no?

-Me vas a prometer que no vas a contar nada de esto?

-No voy a decir nada a nadie, quedate tranquila y chupame la pija que me estoy muriendo.

Ella se bajó de la cama y sabiendo de lo que iba a hacer abrí las piernas para que se coloque entré ellas y no saben el placer que me dio cuando tuve mis manos apoyadas sobre su cabeza y mi poronga dentro de su boca, era la trola que necesitaba tener en mi casa.

-Hmmm que rico putita -dije yo en reiteradas ocasiones.

Debe haber sido la mejor chupada de pija que me hicieron hasta ese momento, era de un nivel VIP bien pago. Pero lo mejor de todo fue cuando se empezó a sacar la ropa y me dejó ver por primera vez su cuerpo y era un caramelito sin ningún defecto, cinturita de avispa, pechos firmes y un culito blanco que era una delicia.

Ya desnuda se subió arriba de la cama, acomodo mi poronga en la entrada de su concha y empezó a cabalgar y a gemir despacio con una voz muy dulce.

-ahhh ahhh ahhh -decía ella dulcemente.

Para que ella disfrutase mejor de la cabalgata la agarre de la cintura y la ayudaba a impulsarse hacia arriba lo que provocó que durante unos segundos ella levantase un poco la voz al gemir. Luego se dio vuelta y empezó a cabalgar de espalda y yo aproveché para observar como mi pija desaparecía dentro de ella y para cachetear esas nalgas que quedaron marcadas con mis manos.

¡¡Plap plap plap!!

-Te gusta puta.

-Ahí me encanta.

¡¡Plap plap plap!!

-Ahh ahh.

A la muy puta le gustaba ser cacheteada en las nalgas y yo con gusto se las daba.

Luego de eso llegó el momento que deseaba hace bastante tiempo, de romperle el culo a pijazos y no estoy hablando de sexo anal sino de la mejor postura para tener sexo de verdad. Ella se puso en cuatro patas y me entregó el culo, yo me bajé de la cama y agarrándola de la cintura se la mandé de una por la vagina y no saben el grito que pego la muy putita.

-Ahhh, me dolió eso.

-No sabes cómo te va a doler ahora putita de mierda.

Llevé mis brazos a sus hombros y la empecé a martillar con toda la fuerza que tenía y con la que no también, quería que ella disfrutara de una buena cogida y sus gemidos me daban a entender que lo estaba gozando.

-Ahh ahh así así así ahh ahh así me gusta.

-Te gusta puta de mierda?

-Si si si Ahhhh.

Por ser la primera la vez que me la cogia de esa manera no me detuve un segundo debido a la excitación que tenía así que no aguante demasiado pero creo que fueron suficiente para que lo haya disfrutado.

Cuando sentí que iba a acabar retire mi pija de su vagina, me saqué el preservativo y me subí arriba de la cama. Entonces me hice una paja y le eche toda la leche en la cara.

-Ahhh que delicia -dije yo al haber explotado en su cara y arrojado toda la leche que me había hecho acumular.

Aun teniendo la cara bañada en semen agarró mi pija y usando su boca me la dejó limpita.

-Viste que no era para tanto, no sé porque hacen escándalos algunas chicas cuando se las invita a tener sexo.

-La verdad que tenés razón, pero no digas nada a nadie no quiero tener problemas con tu hijo o con tu señora.

-Con tal de cogerte no voy a decir nada, pero te gusto?

-Me encantó, su hijo no me hace estas cosas.

-No aprendió nada de mí. Cambiando de tema, que te parece si nos damos una ducha y luego comemos algo.

-Bueno, está bien.

Continuará...

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