Te platicaré como fue la primera vez con una pareja de casados.
No fue mi intención hacerlo y ni se me cruzaba por la mente hacer tal cosa.
No estaba en mis planes.
Tendría yo como 24 años, aun soltero. Trabajaba en una empresa, en la Ciudad de México, con múltiples problemas laborales por las que tenía yo que acudir muy cotidianamente a la Junta de Conciliación y Arbitraje. Ahí me encontraba con un abogado de una Dependencia Federal que, también tenía asuntos que tratar ahí seguido por lo que nos veíamos a menudo. No falto un día que nos fuimos a tomar una cerveza o trago en un Bar de ahí cerca de la Junta. Comenzamos a llevarnos e intercambiábamos experiencias laborales y nos ayudábamos con algún consejo en algunos asuntos.
Este abogado al que llamare Apolo de 45 a 50 años, más o menos.
Se fue volviendo una costumbre y llegamos a ser amigos. Apolo era muy dado a hablar de sexo, de mujeres, de coger mujeres y de como cogerlas, era como muy lujurioso, a veces al extremo.
Hasta que un día después de un día de trabajo como a las 2 p.m. de nuevo nos fuimos a tomar unas cervezas, pero es vez ya no fueron dos, el comenzó a insistir que tomáramos otra y luego otra y así hasta que nos dio las 6 o 7 de la tarde. Entonces él me dijo que como ya era tarde para que no se enoje su esposa la hablaría por teléfono para que viniera a acompañarlo y así se ahorraría el enojo de ella. Y así fue, le hablo, y ella llego en mas o menos en una hora y media, ya para eso yo y el ya estábamos en un estado de ebriedad mas o menos ya considerable, pero aun bien. Llego su esposa y me la presento, era una señora madura como de 45 años aproximadamente, no gorda diría, llenita, nalgoncita, muslos gruesos, u poco acinturada y no mucho pecho, pero unos senos de tamaño aceptable. Ya ni sé de que tanto platicábamos pero ella se la pasaba la mayor parte callada y algo tímida. Ya como a las 10 de la noche Apolo dijo que tenía una botella en el carro de un ron y unas cocas que había comprado para llevar a su casa para el fin de semana, y que porque no la seguíamos tomando, pero que como las casa de ellos estaba muy lejos (Distrito Federal) que rentáramos un cuarto de un Hotel para seguir tomando. Buenos a esas alturas ni decir no, me dejé llevar, me sentí en confianza, aunque no me estaba yo cayendo si me sentía ya muy intoxicado,
Fuimos al cuarto de un Hotel y yo hasta ahí no me imaginaba nada. La cosa es que una vez ahí Apolo preparaba las cubas, y hasta limones llevaba y las servía muy cargadas a mí, pero me di cuenta que los tragos de su esposa le echaba mas de la mitad de ron, más cargados, más que a mi y las mía con trabajo podía tomarla de lo fuerte que estaba, ya desde ahí me comencé a dar cuenta que como que pretendía emborracharme a mi y a su esposa, pero yo cada vez que podía y lo descuidaba me levantaba de donde estaba sentado y le echaba yo mas coca cola a mi trago, para bajarle. No veía el caso de quedar tirado.
Ya ahí el le sube el volumen a la música ambiental del cuarto, y saca a bailar a su esposa, y la tenía muy pegada hasta mas de lo normal, yo pende bueno que onda de hacer eso ante otra persona, bailo ahí una, luego al rato otra, hasta que me dijo que bailara yo con su esposa, pero para eso su esposa hablaba lo necesario, muy poco y gran parte del tiempo con la vista hacia abajo. Yo no supe que responder dije que no que estaba yo bien y Apolo insistió que para que no me aburriera, en fin me convenció y baile una pieza con ella pero retirado, no pegado a ella. Hasta que cuando ella fue al baño, el se me acerca y me dice que yo baile pegado a su esposa, que no había problema por él, que había que pasarla bien, para eso yo ya me sentía bastante borracho, pero aun así me quede callado como queriendo procesar lo que el me había dicho, no respondí nada pero no sabia que pasaba,
Pero al rato cuando el se fue al baño, le dije a ella lo que su marido me acababa de decir y que yo no sabia que hacer que yo no quería portarme abusivo, entonces ella me dijo sin casi levantar la mirada que su esposo quería verla con otro hombre que ella no estaba de acuerdo, pero que tenia años con ese problema de él estar insistiendo, y que ella había accedido a ir pero que nunca pensó que estuviera acompañado el, que el solo le dijo que estaba tomando con unos amigos y que la intención de ella era que al llegar ella, ellos se irían a otro Bar pero solos. Me dijo ella que ya se estaba dando cuenta cual era la intención de Apolo. Y que si había aceptado ir aun Hotel es por ya con unos tragos darle un poco de gusto a el, pero que ella no quería hacer nada.
Al salir del baño el, yo ya sabia sus intenciones, y el continuo sirviéndonos mas cubas bien cargadas y volvió a decirnos que bailáramos, y así lo hicimos y cada vez que daba yo la vuelta y quedaba yo frente a el, me hacia señas que las apretara, y yo no me decidía pues yo, ya sabía que pensaba ella. Hasta que se paro el poniéndose atrás de sus esposa agarro nuestro ritmo y como se pego a ella, eso hacia que ella quedara mas pegada a mi y así estuvimos los tres pegados como abrazados moviéndonos, bailando, De pronto vi. Que el comenzó a acariciarla, a tocarle las piernas, las nalgas, al sobaba toda y después tomándome del antebrazo me hacia que yo recorriera el cuerpo de ella, ahí como que, yo me quede tranquilo porque ella veía que el me estaba haciendo que yo la tocara, espere una reacción por parte de ella que se separara o protestara pero vi. que no y si en cambio comencé a oír su respiración un poco mas agitada en mi oído, el seguía haciéndome señas que la acariciara toda y agarrando la cabeza de ella por atrás la separo de mi oído y hombro y casi nos obligo a besarnos, eso fue todo, ella comenzó a responder al beso o mas bien ella comenzó a besarme y yo a responder, ya nos olvidamos, y mientras nos besábamos el comenzó a quitarle la ropa desde atrás de ella, yo solo besaba y tocaba sus nalgas y piernas pero sin intentar quitarle ninguna prenda de su ropa, ni ella, era el marido quien poco a poco a poco la desnudaba hasta que me la dejo en brasiere y calzón, y yo, todavía vestido, fue cuando casi en un santiamén me comencé a quitar la ropa, y mientras como para que no se enfriara ella, Apolo casi se tito un clavado en su vagina con el calzón puesto aun, así, de buenas a primeras se bajo y veía que le comenzaba a mamarle la vagina encima del su ropa interior.
Cuando estuve yo, ya desnudo, Apolo me dijo: “quiero ver que le bajes el calzón a mi esposa”.
Me acerque y viéndole la cara a ella, vi en sus ojos que ya estaba dispuesta. Sentí que ya tenía el permiso de ella.
Viéndola a la cara, a los ojos, metí mis dedos en el elástico de su ropa interior y se los fui bajando lentamente, sin dejar de verla a los ojos. Ella emitió un suspiro.
Y escuche que Apolo dijo: “que hermoso espectáculo”
Volteé a ver a Apolo, él ya estaba ya desnudo, con tremenda erección, sobándose el pene y dijo: “desde hace mucho quería yo ver esto, ver que le bajaras el calón a mi esposa”
Apolo, siempre demostró ser muy posesivo y creo algo machista.
Una vez que le bajé los calzones a su esposa, ahora ella cooperando al levantar sus piernas para que su prenda saliera por sus pies, él casi me la quita de enfrente, donde estaba parada frente a mí. Tomándola de la mano a su esposa la conduce a la cama, la ayuda a acostarse, le retira el brasiere que aun tenía, me hace una señal para que me acerque a la cama y me dice:
“llégale, hazle lo que quieras, cógetela, quiero ver que te la cojas”
Me acerque y comencé a besarla, baje por sus pechos, se los chupe, en tanto vi. que el se fue a sentar a un sillón en un rincón. Yo seguí bajando hasta si vagina y recuerdo que su clítoris era bien redondito, un botoncito algo como una canica, era fácil de atrapar entre los labios, chupe chupe y chupe, sentí como ella se retorcía con algunos ruidos guturales queriéndolos contener.
Asi estaba lamiendo y chupando, metiéndole la lengua lo mas hondo que podía y sentía como ella se retorcía y emitiendo pequeños ruidos que se le escapaban.
Se me acerca Apolo y me dice casi al oído: “quiero ver que te mame la verga, pónsela en la boca”
Dejé de hacer lo que estaba haciendo, me pongo de rodillas a la altura de su cara y boca con el pene cerca de su boca y le dice a su esposa:
“Mámale la verga” “quiero ver que le mames la verga a otro”
Al principio tímidamente, solo abrió un poco los labios y dejó que le entre apenas la punta, la cabeza.
Pero, Apolo se acercó a ella y le dijo:
“Mámasela, métete toda la que puedas en la boca”
y pareciera que él le daba instrucciones de cómo hacerlo.
Ël decía: “lámele la cabeza” y ella lo hacía.
El decía: “métela toda en la boca” y ella lo hacia.
“Dale besitos” y ella lo hacía,
“chúpale los huevos” y ella lo hacía
Hasta que Apolo me dice a mi:
“Ya cógetela”
“Métele la verga”
“quiero ver que le metas la verga”
“Esta mujer es mi esposa, te la presto para que te la cojas”
Me fui colocando entre sus piernas y la fui penetrando estaba súper mojada bien rico se la metí toda y ella se revolvía debajo de mi, entonces Apolo se acercó y me dijo:
“Despacio… despacio, es la primera vez que entra otra verga en esta panocha que no sea la mía”
Y añadió:
“Quiero que le guste, para que acceda otras veces”
Se la saqué un poco y la penetré con mas calma
El repetía y repetía como enardecido:
“quería que probara otra, quería que probara otra verga y ver como se la meten”
Y le decía luego a ella:
“ya vez que te iba a gustar”
“disfrútalo mi reina” suéltate, nadie se va a enterar que ya cogiste con otro hombre, que ya te coge otro hombre además de mi”
“porque te va a seguir cogiendo él verdad?
Después de casi toda la noche de estar ella callada, por fin dijo: “Si”
Y añadió: “tu quieres?”
Apolo le dice: “Si quiero”
A partir de ese momento, mientras, yo se la metía y sacaba, le metía la verga hasta el fondo, se la sacaba toda fuera de la vagina y se la volvia a meter completa. Ella se retorcía, con ruidos como
“mmmm, agh, ajjjj, quejidos de gusto, que mas me excitaba
Ellos dos, entre quejidos de ella, tenían una plática muy excitante, que me ahora a mi me enardecía. Desde eso aprendí lo importante que es a veces hablar y estimular a la mujer con frases calientes y cachondas.
Apolo: “Quiero que lo tengas de amante, de planta”
“O, a ver di que ya no quieres, como me decías”
Ella dijo: “Si quiero”
Apolo: “ya ves, te dije que te iba a gustar”
“Y te busqué a un joven de amante”
Y de pronto ella dijo algo a Apolo que me dejó perplejo y hasta la fecha recuerdo:
“Amor, si me gusta, pero no quiero ser una puta”
“Esto no me hace una puta?”
Apolo:
No mi Reyna, si yo estoy aquí contigo, yo te lo conseguí, yo te lo busqué”
“No me estas engañando”
“No me estás siendo infiel”
Apolo no paraba de hablarle, la excitaba mas con lo que le decía y a mi también.
Fue muy estimulante escucharlos.
Y así le decía muchas cosas, le hablaba y le hablaba el acostado a un lado y si acaso acariciando a su esposa de piernas abiertas era Apolo:
“Mi reyna, te ves hermosa abierta de piernas con V…”
“Debieras ver cómo te ves abriendo la piernas para V…”.
Ella: “Te gusta verme así?”
Apolo: Si, tu sabes cuantas veces te pedí esto”
Cuando conocí a V… y tratarlo supe que él era el indicado”
Yo, seguía calentándome mas y mas, por mementos tenía que quedarme quieto, con la verga adentro sin moverme para no eyacular, para tomar el control. Para no venirme.
Quería tardarme mas tiempo, para seguir escuchando esa plática tan excitante entre ellos.
Otras veces se la sacaba por completo para recuperar el control. Esa vagina, esa plática de ellos dos era lo máximo
Apolo: “Cuando tengas mas confianza con él te va a gustar mas, ya veras”
Ella: “Si? Tu crees, todavía me da un poco de pena con él. Siento me dará pena cuando nos volvamos a ver”.
Apolo: “No Reyna, todo estará bien es de confianza”
“Mi Reyna, dile a V… cuanto te gusta lo que te está haciendo, dilo”
Ella: “Esta muy rico”
Y en eso, sentí como ella se empezó a convulsionar y a retorcerse y a emitir ruidos de “ah, aggg, y luego un jmmm, ahhh, ya, yaaa, ay que rico, que riiiico”
Y una largo “aaahhh”
Y después de ponerse tensa, aflojo y relajó tod su cuerpo.
Aumenté mi ritmo de mete y saca y ya perdí el control, me vine.
Sentí que se salía el alma, Y eyaculé adentro de ella. La clave hasta el fondo y le solté todo mi semen es su interior.
Así me quedé un raro encima de ella, recobrándome, recobrando energías para levantarme de encina de ella.
Hasta que me tocó Apolo el brazo y me dijo: “Dame chance a mi”
Me retiré de encima de ella.
Apolo se colocó entre las piernas de su esposa, se la metió, unas cuantas bombeadas.
Pude escuchar el plaaaf… plaf o el ruido de su verga entrado y saliendo de la vagina de su esposa con mi semen adentro, sonando y escurriendo.
Y vi como Apolo descargaba su semen en una vagina que ya tenía semen de otro.
Y con tremendo alarido eyaculo.
Y Apolo dijo: “V… ya somos hermanos de leche”
Fue algo raro para mi en esa época.
Un poco con sentimientos encontrados.
Coger a una mujer con semen de otro. Digo, en ese tiempo.
Me dejó impactado.
Ahora, y muchos años después si lo llegue hacerlo y era hasta excitante batir la leche de otro.
Pero. Fue una experiencia extraordinaria.
Fue la primera vez de muchas mas con ellos.
Les debo mucho, les estoy muy agradecido por tan formidable experiencia.
Hicimos muchas cosas mas. Siempre con la “dirección” de Apolo.
Digo dirección porque Apolo era muy dado a manejar la situación a decir haga esto, háganlo así, ponla así, y a ella le decía, hazle esto a Vic…, deja te lo hagan así.
Siempre cosas nuevas.
Llegamos a tener mucha confianza, llegué a sentirme como parte de ellos.
Solo porque nunca supe donde Vivian, pareciera su esposa era mi novia. O cuando salíamos era un matrimonio de 3.
Salíamos a bailar, a cenar a tomar la copa.
Yo por cuestiones de trabajo me fui al norte del país de México. Y antes de casarme ante la petición de ellos, llegué a tomar un avión e ir a la Ciudad de México, solo para estar con ellos. Un viaje solo para verlos.
Ya en otra ocasión contaré que mas hicimos.
Tiene año que ya no se de ellos, muchos años. O ya no existen o están muy viejitos.
Me hubiera gustado verlos, aun ya ancianos, edad que me llevaban.
Bueno, es todo por ahora, y ya platicaré, como fue la siguiente vez…
Vic
Ese día no fue lo que se dice un trío porque después de que yo termine, el se le subió y también le echo su semen adentro, sin lavarse, y eso me excito mas.
Después ya en otras ocasiones si ya hicimos trío o se las dos a la vez uno penetrándola otro por la boca… Y él me dijo que ella había ya aceptado ya venir ya sabiendo a que iba pero que no quería conocer a otro que solo yo con ellos dos.
Desde eso me excita, el penetrar a una mujer con el semen de otro, pero ya no hay oportunidad mas ahora que ya se hace con preservativo, no como antes que era si el porque no había tantas cosa como ahora.