Mi primo, El Animal, como le dicen mis amigas
Todos los sábados nos juntamos en el club del pueblo para charlar, jugar tenis, pelota paleta, nadar. Ese no era un sábado diferente. Y como era pleno verano, la mayoría en malla. Yo, con mis 20 años, sin novio, con un cuerpo aceptable, trataba de pasar el tiempo deleitándome con los chicos que muy a la ...