Economista y prosti: Segunda inauguración (1)
La verga de Sebastián era un hierro y me dijo que me parara, también él se paró al lado de la cama y se arrodilló a seguirme chupando la concha. Después me hizo arrodillar en la cama y se dedicó a chuparme el culo, lo punteaba con la lengua. “Que lindo culo tenés S...