Esclavo de mi fantasía (Parte IV)
Acostado en mi cama, con una sensación de desahogo y calma, vuelvo a ver el mensaje de Samir en el celular.
“Me dijeron que te fuiste con Antonio, donde estás?” (Sonrió y lo pongo a un lado)
Simplemente decidí no responder concentrándome en algunas actividades que debía entregar ...