Pesadilla en el autobús (Parte 2)
Al momento de llegar, ya al sitio donde nos debíamos bajar, el muy amablemente me tomo de la mano y luego me abrazo por la cintura. Me ayudo a bajar y como aún faltaban algunas cuadras caminando para llegar a mi casa, me detuvo y me dijo.
- ¿Quieres que te lleve a tu casa y hablemos con tus padres de lo ocurrido?
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