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Abriendo mi regalo

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Se acercaba mi cumpleaños donde cumpliría mi mayoría de edad, lo que para muchos significaba la apertura de la puerta al mundo, que para ese momento se podía reducir a la libertad, libertad para ir a bares, libertad para comprar trago, libertad para tener sexo, libertad para donde las putas, libertad para hacer lo que quisiera sin pensar en las responsabilidades pues en palabras de mis amigos usted ya es grande!

Y además de una familia acomodada donde nunca me había faltado nada al contrario sobraba lo cual me hacía presumido y algo caprichoso. Lo cual no era raro porque toda mi familia tenía las mismas características por eso no fue raro que mi padrino Fernando quien era un reconocido ejecutivo de un canal de televisión me hizo el mejor de mis regalos, pero todo comenzó con una pregunta; “Que quieres de cumpleaños Ricardo Andrés?”. Para ese momento no tenía la respuesta clara estaba entre un viaje o una moto y no cualquier viaje, ni cualquier moto. Pues el viaje que me llamaba la atención era un tour a Las Vegas o Hong-Kong ciudades que invitaban al derroche y la farra, mientras que la Moto podría ser una Ducatti o una BMW de turismo para montarla por la carreteras de Latinoamérica pero al final le dije a mi padrino Fernando ‘sorpréndeme!’.

Y sí que lo hizo porque también me organizo una fiesta sorpresa en un reconocido hotel de la ciudad donde estaban todos mis amigos y los amigos de los amigos por lo que había una multitud de asistentes, sin embargo debo confesar que para esa noche tenía otros planes con mis amigos, lo cuales era ir a un reconocido burdel donde estaban las putas más caras de la ciudad, pues decía que eran muy ricas y por dinero se prestaban hacer de todo, lo que nuestras novias o amiguitas no podían ofrecer, además todo hombre joven sabe que un mujer mayor ofrece no solo experiencia sino también más cuerpo de hembra!

Por eso estábamos tan ansiosos de ir a estrenar nuestra mayoría de edad, para lo cual ya nos habíamos preparado con anticipación pues no solo compramos los preservativos lo cual generalmente exigían esas rameras sino no tomamos la tarea de investigar poses sexuales para ir con conocimientos y dar la talla, sin embargo la ansiedad me paso cuando llego el Show de la fiesta pues mi padrino gracias a su poder había contratado el conjunto vallenato de una de sus novelas donde la cantante era la hermosa María Elisa, la actriz protagónica y a su vez cantante de la novela que en persona era todavía más bonita que fue imposible no quedar deslumbrado con sus atributos que resaltaba con su atuendo el cual era un traje corto enterizo ceñido a cuerpo de color purpura, donde se podía detallar gracias a sus tacones y su short unas largas piernas tonificadas acompañados de unos hermosos muslos carnosos que se desprendían de su exuberantes caderas que a su vez inevitablemente hacer un alto para detallar su pelvis que claramente era una entrada en V cubierta por el short y seguramente también por un panty, pero aún mejor era ver su escote sugestivo que alucinaba con unos pechos cuantiosos blancos que decoraba con un dije dorado que le colgaba del cuello casi de cisne donde se amarraba su traje con dos tiras que ayudaban a sostener sus exuberantes senos, pero también estaba su rostro de facciones finas y armoniosas, ojos grandes de color caramelo y una boca seductora con labial rojo que combinaba con sus manos de uñas largas y rojas también, propias para la ocasión que caracterizaba el personaje por lo que tenía una peluca rubia de rizos lo que no le quedaba mal porque la hacía ver como una leona, qué igual la hacía tan bella como con su cabello natural castaño.

Para ese momento María Elisa nos tenía boca abiertos a más de uno, era realmente arrolladora y seductora en el escenario y no solo por su buen cantar sino realmente era todo un plato fuerte aunque para otros seria el postre de la noche, lo cierto era que nos había despertado el apetito. Luego se me acercó mi padrino Fernando y me dice; “Que tal el regalo sorpresa Ricardo Andrés?” A lo que le respondí muy entusiasmado; “Fascinante!” y con una risa sarcástica me responde; “Talentosa no ahijado?” e igual forma le respondí; “Si padrino lo que tiene son suculentos talentos” y termino diciéndome mi padrino; “Ahora te la presento para que recrees el ojo de cerca”.

Al terminar de cantar una tanta María Elisa mi padrino cumplió su palabra y la trajo a la mesa para presentárnosla, ella muy dulce me dice; “Tu eres Ricardo el cumpleañero?, que lindo felicitaciones” y tartamudo le respondí; “Si si hola gracias…” Y es que fue difícil no ponerme nervioso cuando la vi parada al lado mío semejante hombrón que por los tacones la hacía ver solo poco más alta que yo, que me confirmaba que era un enorme regalo que desafortunadamente no podía ni tocar por ganas que tuviera solo debía conformarme con ver, pero de todas formas solo ver era verdaderamente un recreo, estaba lo suficientemente cerca para admirar sus pechos y como se inflaban al ritmo de su respiración que saboreaba en silencio hasta que fui tan evidente que logre incomodar a María Elisa que solo rio cuando vio que estaba observando sus pechos aunque en realidad estaba era morboseandolos.

Luego solo se levantó para seguir cantando y nuevamente se robó toda nuestra atención solo que ahora teníamos cara de hambrientos que nos tenía al borde de la locura que tratamos de mitigar con un par de tragos de licor pero que solo nos envalentonaron al pasar un rato, a tal punto que poseído por la lujuria sin darme cuenta estábamos forzando la puerta de su camerino lo cual no fue tan difícil gracias a la bulla de la fiesta sin embargo María Elisa voluntariamente termino por abrir la puerta al escuchar los golpes lo que facilito que bandada literalmente sin darle preaviso arrolláramos a María Elisa empujando hacia adentro del camerino donde sin darle tiempo entre cuatro la apresamos, a pesar que como Leona trato ferozmente María Elisa de resistir el ataque coordinado, pero la fuerza bruta ejercida del grupo termino por dominar la fiera que en segundos como llenas hambrientas empezamos a saborear a María Elisa despojándola rápidamente de su traje purpura incrementando nuestra apetencia en especial cuando vi sus enormes tetas que no me aguante las ganas de apretarlas y chuparlas.

Perdiendo por completo la cordura entramos en una contienda con mis amigos que ahora rivales buscábamos ser el primero en penetrar a María Elisa, que alterada no pudo evitar nuestra lucha salvaje por ella, a tal punto que hubo golpes fuertes entre nosotros, también cuatro vergas rígidas y erguidas buscando la entrada de María Elisa que por un momento nuestra obstinación llego a tener mi verga y la verga de mi amigo Fredy forcejeando en la vulva de María Elisa que estaba patiabierta y Fredy y yo metidos entre sus piernas donde por fin gane la pugna y mi verga termino por hundirse en la vagina de María Elisa que muy abatida solo gritaba mientras lidiaba con mi verga que en su apogeo pujaba y pujaba repetidamente hasta que alcance el ritmo adecuado que hizo que María Elisa tuviera múltiplex espasmos que era evidente que tenía un orgasmo y evidencia que se entregaba a mi dominio y poseyéndola libere no solo toda mi energía en ella sino también una buena dosis de esperma qué remato a María Elisa, dejándola doblegada para que mis otros tres amigos comenzando por Fredy la montaran también donde María Elisa muy obediente se prestó a las órdenes de estos.

Para ese momento podíamos concluir varias cosas que monte algo más grande que una moto, que me ahorre el viaje, la ida al burdel, el gasto de los condones y aun mejor que abrí el mejor regalo de cumpleaños, y me lo comí todo!

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