Nuevos relatos publicados: 6

Las ventanas del hotel

  • 4
  • 15.901
  • 9,31 (16 Val.)
  • 0

¡Hola! En esta ocasión voy a contarles una pequeña experiencia que tuve el año pasado que aunque parezca algo simple, realmente me puso mucho y hasta hoy la recuerdo y me sigue excitando.

Para los que ya conocen mi perfil sabrán que tengo novia y somos una pareja liberal que ama hacer tríos e intercambios. Pero este relato es más personal mío y va de voyerismo y/o exhibicionismo. Para los que no me conocen soy Darío, tengo 29 años, flaco, 1,78 m, pelo negro.

Todo sucedió cuando con Cami mi novia habíamos ido de vacaciones a una ciudad con playas, no importa donde, el hotel tenía unos 4 pisos y las habitaciones tenían ventanas balcones (terraza como algunos lo llaman) con vista a un patio interno dónde estaba la piscina y enfrente nuestro, otra torre del mismo hotel con las habitaciones exactamente iguales, nos tocó una habitación en el segundo piso y pasé toda la semana observando a los vecinos de enfrente, sus movimientos, horarios aproximados y lo que más rutinario parecía era la hora de la limpieza dónde las mucamas del hotel hacían las habitaciones por la mañana, abrían las ventanas, hacían las camas y pasaban un buen rato limpiando.

Entre los vecinos esa semana recuerdo a una familia de 3 asiáticas, madre y 2 hijas que estaban también en el piso 2 en diagonal derecha de nuestra habitación, muy reservadas en lo que se dejaban ver pero bastantes mironas cuando yo me paseaba en calzones por mi habitación. Un piso más arriba frente a nosotros había una pareja con un bebé y la chica solía pasearse por el balcón en bikini pero no mucho más que eso. Un piso más abajo en diagonal izquierda a mitad de semana llegó una pareja y la mujer era bastante descuidada con las cortinas, se desvestía con las ventanas abiertas y en dos ocasiones la pude ver en tetas y otras varias en tanga probándose pantalones.

El resto de las habitaciones tenían gente pero la mayor parte del tiempo estaban con las cortinas cerradas, excepto cuando las chicas de la limpieza las abrían entre las 8 y 10 de la mañana, yo solía levantarme temprano mientras Cami dormía y me paseaba en ropa interior frente a mi ventana viendo los movimientos de las chicas de enfrente que estaban a unos 20 metros, fueron 2 o 3 veces cuando logré llamar la atención de alguna de ellas y note que me miraban aunque solo andaba en bóxer.

El ante último día antes de volver a casa decidí que quería arriesgarme más, ya que no volvería en años a ese lugar, entonces me levanté temprano cerca de las 8 mientras mi novia dormía en la habitación y me fui al sector de la sala que tenía el balcón (terraza) abrí las ventanas y oberse cómo estaban las cosas en el edificio de en frente, note algunas chicas en piso 1, 3 y 4 que estaban bastante lejos pero justo en el piso 2 a nuestra misma altura vi que recién entraba a una habitación en diagonal izquierda a nosotros una chica flaquita, pelo castaño claro atado con una cola, ella recién había abierto las cortinas y estaba desarmando la cama, me pareció perfecto para animarme a mostrarme ya que estaba a la altura justa y en diagonal, abrí los vidrios de la ventana y acomode las cortinas de forma que solo se pudiera ver hacia adentro de mi habitación desde el punto donde estaba la chica en la habitación de enfrente, yo estaba en calzoncillos, tenía en ese momento un slip negro que parecía una sunga que marcaba mi paquete y no tapaba mucho más, me puse un toallón colgado en el cuello como si estuviera en plan de ducharme y empecé a caminar de un lado a otro disimuladamente para que la chica me notara, yo aún podía verla a ella a través de las cortinas que traslucían un poco hacia afuera, entonces en un momento ella se quedó observándome y me puse muy nervioso.

Trate de actuar normal como si buscara ropa arriba de unas sillas mientras me paraba en el lugar donde ella podía verme de cuerpo completo por las cortinas abiertas, de reojo veía que me seguía mirando mientras juntaba las sábanas de la cama, entonces fue que decidí que debía animarme a más, después de todo yo estaba en mi habitación y ella era la mirona, no podían decidirme nada, a lo sumo podrían pedirme que cierre las cortinas y diría que no me había dado cuenta de ello.

Decidí quitarme el calzoncillo, me lo saqué lentamente casi de frente hacia la ventana y lo deje en la silla mientras me hacía el que buscaba más ropa, solo con la toalla en el cuello mi pene ya estaba erecto pero trataba de disimular inclinándome hacia adelante como buscando algo, de reojo y a través de las cortinas podía ver a la flaca mirándome mientras se tomaba su tiempo para hacer la cama, me puse otro calzoncillo, esta vez un bóxer y empecé a caminar de un lado a otro asegurándome que ella siguiera allí viéndome, y así fue, ella seguía de curiosa en la ventana mirando hacia mi habitación, ya muy caliente y con el corazón a mil, decidí que si ella quería ver entonces le mostraría un poco más, me volví a quedar parado en su campo visual y me quite el bóxer, me hacía cómo que hablaba con alguien y seguía buscando ropa, daba vueltas y le dejaba ver mi culo y luego volteaba para que me viera la pija directamente, ella seguía mirando y yo me moría de morbo, temblaba de nervios, me excitaba muchísimo que una desconocida me estuviese viendo desnudo y yo seguía fingiendo no darme cuenta, pasaron unos 5 minutos así, yo seguía con la pija parada dando vueltas y ella seguía mirando mientras ordenaba la habitación.

Luego note movimientos en las cortinas de otra habitación y me escondí detrás de mis cortinas, pude espiar que había otras 2 chicas espiando hacia mi habitación y me di cuenta que la chica que me había estado mirando les había contado seguramente por teléfono ya que estás 2 estaban en el piso de abajo, entonces me puse un poco nervioso y decidí ponerme los calzoncillos y un short, luego de un momento me asome al balcón a colgar mi toalla y efectivamente la chica de en frente seguía mirando ahora más disimulada y las otras 2 en el primer piso se asomaron y sonreían cómo desilusionadas por no haber visto nada raro, solo a un turista que salió de bañarse en short y colgó el toallón en el balcón. Luego me fui al baño y al salir ya todas se habían ido.

Puede que a muchos les parezca una estupidez mi relato pero a mí realmente me excito muchísimo sentirme observado por una desconocida que me miraba la pija durante más de 5 minutos. Espero volver a hacerlo algún día en otro lugar, ya he hecho algo parecido en otros lugares pero solo en ropa interior, nunca lo había hecho quedándome completamente desnudo.

En otra ocasión, si las valoraciones de este tipo de relatos son buenas, entonces les contaré mis demás experiencias exhibiéndome por ahí a desconocidas!

Gracias por leer! Saludos!

Darío

(9,31)