Quizá debí negarme o actuar de otra manera, pero no lo hice y ahora la cosa ya no tiene remedio. Como decía mi padre, a lo hecho pecho… pero será mejor que empiece desde el principio y de una manera coherente...
Cuando llegué y entré en la habitación que me indicaron, vi a ocho hombres maduros y trajeados en sillones que formaban un enorme círculo. En el centro había un colchón y un par de cámaras en trípode...