Ana es una mujer madura de cincuenta muy atractiva. Durante las primeras semanas en la empresa me correspondió enseñarle los procedimientos internos y al visitar el archivo del sótano ella se convirtió en mi maestra avanzada.
Ella se rió y me dijo que era verdad que estaba completamente empapada y que hasta las bragas tenía mojadas, con lo que me hizo reír pensando que seria una ocurrencia.
Este martes es el primer día en qué iré antes a la casa de Fernando, como quedamos con Manuel. Se ha encaprichado de mí. Él saldrá antes del trabajo y quiere que también le dé un cierto tipo de clases particulares. A mí no me importa e incluso me gusta porque, aunque ya bastante mayor
Soy una mujer de cincuenta y siete años, soltera por decisión propia, no me voy a describir como una modelo internacional, pero me he cuidado hasta el día de la fecha, tengo un buen físico, aunque la gravedad está haciendo lo suyo, ya, mis tetas no tienen la turgencia de mis mejores años
Vivo en Argentina y como una característica, las mujeres de aquí son hermosas (si se lo proponen) a cualquier edad. No es un comentario machista, es pura realidad. En mi país las mujeres cuidan mucha su estética personal y entonces ves chicas jóvenes muy bellas y también mujeres entradas en edad
Hola a todos, me llamo Aisha, soy una mujer madura de 39 años morena y cabello castaño, rizado, tengo tetas medianas, cintura y caderas comunes, un culo que se mantiene y sexis piernas. Aunque siempre suelo usar ropa grande que no deja ver bien la figura de mi cuerpo.
Todo pasó hace ya algunos años, era yo un joven activo en los deportes, los amigos y los estudios. Durante la semana estudiaba y trabajaba con mis padres en un negocio familiar y los fines de semana me divertía con los amigos de la cuadra
Su coño hervía, y su mente remoloneaba con deseos y hambres eróticas, se volvió de espaldas, presentando su enorme culazo a su sobrino. Pedrito miraba con la boca abierta el culo de su tía. Sus cachetes estaban tersos, compactos, bien formados, con una maravillosa y caliente raja que los separaba.
Mi mujer hacía ya casi tres años que había muerto, y la verdad es que aquello afectó mucho mi vida. La quería mucho, y teníamos una vida realmente feliz, en todos los aspectos, principalmente en el sexual. Desde siempre habíamos tenido una vida sexual realmente activa e imaginativa, los dos éramos
Estaba en Córdoba. Me enteré por mi madre del fallecimiento de mi amigo Roberto y su padre, cuando volví fui a ver a Teresa, ella estaba destrozada, la cuide y la protegí como si fuese su hijo durante unos meses; ella pudo sobreponerse y curó sus heridas entonces la hice mujer.
Mi tía me invita a que le ayudé en su casa pero mi obsesión por las bragas usadas me lleva a ser descubierto por ella en plena masturbación mientras olía las suyas.
Luego de mi divorcio mi vida y mi actividad fueron cambiando poco a poco, debía modificar algunas cosas, tenía muy en claro que mi prioridad era mi hijo. Había vuelto al trabajo, en la misma escuela era profesora de historia y educación cívica por la mañana y preceptora por la tarde